Según la información recogida por la Oficina, hacia las 5:00 de la mañana un grupo de entre siete y nueve hombres que vestían camiseta negra, pantalón color verde tipo militar, botas militares, pasamontañas cubriéndoles el rostro y que portaban armas cortas, sacaron a 5 indígenas Awa de las casas en las que se alojaban, luego de haber sufrido un desplazamiento forzado. Los agresores los condujeron a una distancia aproximada de 150 metros de la vía Pasto-Tumaco y a 200 metros del colegio del corregimiento, justo frente a la casa de donde sacaron a una de las víctimas, y les dieron muerte. Al momento de aprehenderlos les dijeron que los matarían “por ser milicianos”.
En esta masacre murieron los indígenas Awa Juan Donaldo Morán, ex gobernador de la comunidad; Adelaida Ortiz, profesora; Mauricio Ortiz Burbano, miembro de la comunidad; y los esposos Jairo Ortiz y Marlene Pai, también pertenecientes a la comunidad.
En las últimas semanas en la zona de Altaquer se han presentado combates entre la Fuerza Pública y la guerrilla de las FARC-EP. En el casco urbano de Altaquer desde hace varios días se reforzó la presencia de la Fuerza Pública.
Al rechazar esta masacre, la Oficina invita a las autoridades del Estado a tomar todas las medidas necesarias para proteger y garantizar la vida y la integridad de los integrantes de la comunidad Awa, en particular de sus autoridades, gobernadores y de los miembros de las organizaciones indígenas Awa de UNIPA Y CAMAWARI.
La Oficina confía en que las autoridades pertinentes investigarán, juzgarán y sancionarán a los responsables de esta matanza contra el pueblo indígena Awa.
La Oficina urge, de nuevo, a las personas que participan directamente de las hostilidades a que respeten, sin condiciones, a la población civil.
La Oficina expresa sus sentimientos de condolencia y solidaridad a los 6 hijos del ex gobernador Morán, a la hija de 7 años de la familia Ortiz Pai, a los 4 hijos, menores de edad, de la profesora Ortiz, a otros familiares y amigos de las víctimas, lo mismo que a la comunidad Awa de Nariño y al resto de comunidades indígenas del país.